El diputado por Lanzarote y La Graciosa en el Parlamento de Canarias, Yoné Caraballo, ha instado desde la Cámara autonómica a avanzar en la protección de El Jable mediante su clasificación como Parque Rural, una figura que permitiría conservar su riqueza natural y patrimonial desde una visión integradora.
Caraballo, también presidente insular de Nueva Canarias–Bloque Canarista, reivindicó este espacio como “el alma de Lanzarote”, resaltando su valor agrícola, biodiversidad e identidad cultural. “Es un territorio vivo, forjado por el esfuerzo de generaciones de campesinos y campesinas, como los de la batata de Soo o la sandía lanzaroteña”, afirmó.
El diputado alertó sobre amenazas crecientes: extracciones ilegales de áridos, invernaderos de plástico, vertidos incontrolados y turismo motorizado sin control. Todo ello, advirtió, pone en riesgo ecosistemas únicos, con especies como la hubara canaria.
La propuesta de Parque Rural, defendió Caraballo, evita modelos restrictivos, promoviendo una conservación activa que incluye al campesinado y al tejido agrícola. “No se trata de impedir avances, sino de evitar impactos visuales y ambientales como los de los invernaderos industriales o las torretas de riego”.
Para concluir, recordó que Lanzarote es la única isla canaria sin Parque Rural, frente a ejemplos exitosos como Anaga (Tenerife), Doramas (Gran Canaria) o Betancuria (Fuerteventura), donde conviven sostenibilidad, tradición y protección territorial.