Desde la Asociación de Voluntarios en Emergencias y Rescates de Lanzarote (EMERLAN), trasladan a la opinión pública e instituciones competentes la crítica situación en la que se encuentra actualmente el servicio de ambulancia de urgencias dentro del municipio de Tinajo, bajo riesgo de suspensión en cuanto a su continuidad.
Este servicio de vital importancia lleva desde el año 2006 garantizando cobertura sanitaria urgente en el municipio a través de un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Tinajo. Sin embargo, debido a que dicho convenio no cubre la totalidad de los gastos, ha sido la Asociación la que desde un principio ha ido aportando dinero con la finalidad de mantenerse, una cantidad que hoy en día rondaría un total de 700.000 euros.
Actualmente, pagan anualmente unos 181.000 euros, aportando el Ayuntamiento de Tinajo únicamente 34.800 euros, siendo EMERLAN autofinanciada con prácticamente el triple de la aportación municipal, con el esfuerzo y la convicción de que esta ambulancia es fundamental para la seguridad, no solo de Tinajo, sino en los momentos en los que el servicio ordinario se ve colapsado.
A esta carga económica se añade la falta de apoyo institucional por parte del Ayuntamiento, evidenciada en el incumplimiento de los compromisos recogidos en el convenio. En especial, destaca la obligación municipal de suministrar combustible al recurso sanitario, que no se cumple desde 2023. A ello se suman las precarias condiciones del actual puesto de guardia, lo que coloca al servicio de ambulancia de urgencias de Tinajo en una situación insostenible.
Conviene recordar que este recurso es esencial para la salud y la seguridad de los vecinos de Tinajo, ya que garantiza asistencia sanitaria urgente en horario nocturno (de 20:00 a 08:00 horas), los 365 días del año. Su desaparición obligaría a que las emergencias fueran atendidas desde Arrecife o Tías, en el mejor de los casos, lo que aumentaría considerablemente los tiempos de respuesta y supondría un riesgo evidente para la población.
Desde EMERLAN manifiestan su disposición a dialogar y encontrar una solución equilibrada que garantice la continuidad del servicio y respete, al mismo tiempo, los compromisos adquiridos por ambas partes.