El diputado de Nueva Canarias-Bloque Canarista Yoné Caraballo exigió ayer, en el pleno del Parlamento, el cese del director general de Hemodonación y Hemoterapia, Iván Santiago Falcón, por la “pésima” gestión del servicio evidenciada en la situación “crítica” de las reservas de sangre en el Archipiélago.
El portavoz sanitario del grupo nacionalista progresista afirmó que Sanidad no puede gestionarse como un chiringuito político mientras Canarias se queda sin sangre. Mantuvo ayer que la gente ya no confía en un sistema que salva vidas y eso es gravísimo, al mismo tiempo que respaldó la manifestación sindical convocada para el próximo sábado, bajo el lema Por un banco de sangre seguro y de calidad.
En la primera sesión de control al Gobierno del nuevo periodo de sesiones de la Cámara, Yoné Caraballo demandó la adopción inmediata de medidas ante los “deficientes” resultados en la gestión de la dirección general, lo que repercute directamente en la disponibilidad de sangre en los hospitales.
Caraballo advirtió a la consejera de Sanidad, Soledad Monzón, de que la crisis de sangre ya no es un problema coyuntural ni por el verano, sino la consecuencia de una dirección política que calificó de “fantasma”. Denunció que las reservas de sangre en las islas siguen en “niveles críticos”, poniendo en riesgo operaciones programadas y tratamientos oncológicos, entre otros.